Me hablaste en un sueño
Cruzaba un sol naciente
Y una luna menguante lo perseguía.
Te metiste en mi sueño
Cuando una guitarra cantaba
Acariciando un corazón sangrante.
Me señalaste en un sueño
Mientras merodeaba un lobo
A un trozo de pastel de chocolate.
Me susurraste en un sueño
Cuando lo trescientos sesenta y cinco días
Danzaban desnudos en una fogata.
Me miraste en un sueño
Y mis manos moldeaban
Planetas, materia oscura y universos.
Acariciaste mi sueño
Cuando los arco iris se combinaron
Para formar la oscuridad de mi planeta.
Extendiste tu sonrisa hasta mí
Para que subiera caminando
Hasta ti mi eterna sonata.