Te presentí aquella noche
Entre quejidos y llantos,
Tú silente esperaste.
El dolor se apodera del cuerpo
Solicitando la piedad del descanso
Y yo quieto, calmo sólo te escuchaba.
Las horas se expandían
Y el pesar pasaba,
Nadie corrió, todo en quietud.
Te sentí llegar aquella noche
Y yo quieto a la espera
Vi tus ojos que contenían la nada.
La boca entre abierta
Apenas musitando palabras
Que mi ser no entendía.
Lágrimas a tu rededor
Y tú silente seguías,
Rezos y quizá sortilegios
Que te invocaban sin querer.
Ahí estabas ya a la espera
Presintiendo el último suspiro,
Avanzada la madrugada.
Me quedé estático sin ser
Y llegaste tomando lo tuyo
Lo ya anunciado se hacía real.
Nada fue suficiente ante tu marea final
¿Ya estaba todo escrito? O quizá
Fue el juego del destino que nos alcanzó.
ya una ni sabe quien ..la muerte, la fatalidad o el amor, quien puede llegar?...espera callado.
ResponderEliminarpasando y dejando ya tu sabes que...
hola Ady interesante tu comentario, en cada lectura uno lo lee, como decimos acá en México como le va en la feria, dejemos que las osas fluyan, y de regreso lo mismo :P
EliminarElla,si,ha llegado a mi cercanía,pero no la presentí será que en el fondo no deseaba que llegara...Me ha llegado muy hondo,será mi nube gris que ha estado muy presente o más bien la belleza de tu poema,Gracias Juan,un placer visitarte y llegar a tu planeta,abrazo cargado de emoción...!!! ♥
ResponderEliminarGracias María, a veces es así de sorpresa, otras se anuncia, abrazos y que tu nube se vaya alejando!
EliminarComo dice Ady, dejas abierta la puerta a la mente del lector, yo también pensé lo mismo, que será: la muerte, la fatalidad, el amor...
ResponderEliminarUn abrazo!
Gracias Francisco por pasarte por acá, ciertamente es el final, cuando el amor muere, o cuando alguien querido se va... ambos dejan un profundo hueco que sólo el pasar del tiempo nos dará sosiego. Un abrazo!
EliminarNo podemos hacer nada, cuando ella decide llegar...sólo nos cabe esperar. Así es la muerte, que muchas veces llega sin llamar...
ResponderEliminarImpactante poema, me ha gustado mucho como hablas sobre la dama negra...Un abrazo grande!
Gracias Maite agradezco tus palabras y un placer que te haya gustado! un fuerte abrazo!
EliminarYo no veo amor sino muerte.El amor no te da dolor, no te deja el silencio,Si acaso el desamor es el que se parece a la muerte.te daja un silencio roto y la nada en la vista.etc etc... Un bello y desgarrador poema Juan.bss
ResponderEliminarGracias Isa, se agradecen tus palabras! ambos tienen su estado de fuerza nostalgia y tristeza, ambos duelen, Bss
EliminarTienes mucha imaginación, me gustó mucho el poema y en especial como dejaste el final. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas Gracias Sandra! por tus palabras, un placer que te haya gustado, abrazos!
EliminarBella la muerte cuando llega... tan bella dama a dar su ultimo suspiro y robar mi ultimo aliento.
ResponderEliminarllega el momento en que se convive más a menudo con ella de lo que se quisiera!
EliminarHay silencios que matan y suspiros que dan aliento! Profundas letras amigo! Un saludo!
ResponderEliminarMuchas gracias Sunny se agradecen tus palabras, y es verdad lo que dices, Saludos!
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